La fabricante taiwanesa Master Bus avanza en su estrategia de expansión regional con la instalación de una planta de producción de autobuses eléctricos en el municipio de Minga Guazú, en el departamento de Alto Paraná, Paraguay. El objetivo es producir localmente vehículos de electromovilidad que cubran tanto el mercado paraguayo como la demanda sudamericana.
Planta y exportación al horizonte
Según los avances comunicados por el Ministerio de Industria y Comercio de Paraguay (MIC), la fábrica de Master Bus está emplazada en el Parque Tecnológico Inteligente de Taiwán, en Minga Guazú, y se proyecta que para 2026 la primera unidad de autobús eléctrico salga de la línea de producción con destino de exportación.
Ventajas técnicas y comercialización regional
El diferencial que propone Master Bus radica en la tecnología avanzada de sus modelos: alta eficiencia energética, recargas rápidas y autonomía adaptada para la operación urbana e interurbana. Estas características le permiten plantear un posicionamiento competitivo en el mercado sudamericano, desde Paraguay como base productiva.
La planta en Minga Guazú no solo atiende la demanda local, sino que aspira a alcanzar un “share” relevante en la región, convirtiendo al país en plataforma de exportación hacia el Mercosur.
Impacto e implicaciones para la industria nacional
La instalación de Master Bus en Paraguay representa un impulso para la electromovilidad, la industria automotriz y la diversificación tecnológica. Se espera que una cadena de suministro local, generación de empleo y transferencia de tecnología acompañen al proyecto. Asimismo, el país refuerza su rol como destino de inversión extranjera en manufactura avanzada.
A su vez, la presencia de una fábrica de autobuses eléctricos fortalece la estrategia de sostenibilidad del transporte público y privado, en línea con los compromisos ambientales y de eficiencia energética.
Desafíos y próximos pasos
Si bien el proyecto muestra un potencial elevado, varios retos acompañan su ejecución: la escalabilidad de la producción, la infraestructura de recarga, la integración de componentes locales y la logística de exportación. Master Bus y las autoridades paraguayas deben coordinar licencias, incentivos y capacitación para garantizar el éxito industrial.
El paso previsto hacia 2026 cobra relevancia: será el hito que permita pasar del anuncio a la entrega de unidades reales, colocando a Paraguay en el mapa regional de producción de vehículos eléctricos.
