El 2018 empezó con números favorables para la agroindustria (en la molienda). Se tuvo 216.065 toneladas de oleaginosas procesadas durante enero. En la parte de exportación la cosa no estuvo tan positiva.
De este volumen, 213.401 toneladas corresponden a la molienda de soja, cifra que representa un aumento de 116.802 toneladas más que en el mismo periodo de 2017. Es más, esta cantidad de toneladas es un 63% superior al promedio del volumen procesado en los últimos 5 años (en enero).
En cuanto a la obtención de subproductos a partir de la molienda de esta oleaginosa, se registra un crecimiento de 121% más que el mismo periodo de 2017.
Cabe resaltar que estas cifras se dan a pesar del retraso en la cosecha por las lluvias y los problemas a la hora de transportar materia prima desde el campo a las industrias.
Exportación
A causa de los problemas logísticos generados, las exportaciones del complejo soja alcanzaron apenas USD 146 millones, el valor más bajo para este periodo en los últimos 7 años.
El principal soporte de este segmento de exportación fueron los productos industrializados, obteniendo USD 99 millones de ingresos por exportación, 46% más que en el mismo mes del 2017.
Mientras que los ingresos por exportación de soja en estado natural se redujeron en un 65%, movilizando nada más que USD 47 millones aproximadamente.
Factores externos
Los volúmenes de exportación de soja en estado natural y sus productos industrializados se redujeron en un 25% en comparación a enero de 2017. De esta forma se alcanzó su valor más bajo en los últimos 6 años.
Estos datos se registran en medio de paro de transportistas que dificultó la continuidad de los trabajos de cosecha 2017/2018, el almacenamiento de los granos, el transporte de estos a los puertos, así como la recepción de la materia prima en las industrias y el movimiento de los subproductos obtenidos de aquellas plantas que no están ubicadas sobre la Hidrovía Paraguay -Paraná.
