La Kombi dice adiós después de 63 años de producción
Incompatibilidad con los frenos ABS y airbag fueron los puntos que impidieron la continuidad del utilitario
El día 19 de diciembre del 2013, Volkswagen del Brasil produjo la que es considerada la última Kombi del mundo, hecho confirmado por la marca alemana el día 26 del mismo mes, lo que representa una fecha histórica para muchos amantes y coleccionadores.
La idea fue de un holandés
Al término de la Segunda Guerra Mundial la fábrica Volkswagen de Wolfsburg, Alemania, pasó a manos del gobierno británico, el cual recibió el 23 de abril de 1947 una propuesta del empresario holandés Ben Pon quien propuso la creación de un modelo de carga comercial.
Su producción comenzó el 8 de marzo de 1950 y entre las utilidades que le fueron descubiertas al poco tiempo están su adaptación como ambulancia y como coche de bomberos. Una de las principales características de este vehículo es que ha permanecido prácticamente inalterado desde su lanzamiento y se podría considerar la introducción de la refrigeración líquida y el uso de la inyección electrónica como sus cambios más significativos.
El inicio del fin
El cese de producción de la Kombi (debido a la nueva ley que obliga que todo vehículo producido en Brasil salga de fábrica con frenos ABS y airbag a partir del 1ero de enero del 2014) fue anunciada en agosto debido a la incapacidad del vehículo de recibir estos dos sistemas. La versión Last Edition fue anunciada en agosto para celebrar el final de esta larga historia con 56 años en producción en ese país; son 1.200 ejemplares con placa de identificación, interior diferenciado y exclusiva combinación de colores azul y blanco.
Sus 63 años de vida dan la pauta que un vehículo no estaría tanto tiempo en producción si no tuviera las cualidades y compradores. Lo que empezó como un boceto llegó a convertirse en el vehículo más polifacético del mundo y en un mito para muchos amantes de la marca.
