La capital del departamento de Ñeembucú cumplió 243 años siendo testigo del desarrollo de obras largamente anheladas por los pilarenses: su defensa costera y una renovada ruta Alberdi – Pilar para romper con su histórico aislamiento dando paso a la modernización.
Estas mejoras en infraestructura no sólo impactarán positivamente en la calidad de vida de la población, sino que, además, traerán consigo beneficios para la conectividad y la optimización del uso de los recursos económicos de toda esta región del país.
En el caso de la Defensa Costera de Pilar, su Fase A se encuentra muy avanzada con obras en el Canal de Derivación, en las estaciones de control de los arroyos San Lorenzo y Ñeembucú y en la estación de cierre de este último cauce, arrojando un acumulado de aproximadamente 89% de ejecución en esta primera etapa.
De esta manera, se evitará que las zonas bajas se inunden con las fuertes lluvias, a través de la puesta en operación de las motobombas de desagote que estarán equipados en estos centros de control.
Por su parte, la Fase B, que está en pleno proceso de licitación, abarca obras de desagüe pluvial y sistema de alcantarillado sanitario con planta de pretratamiento de efluentes, y la Fase C, comprende la construcción de la avenida costanera y parques lineales.
En tanto, el primer tramo de la ruta Desvío Alberdi – Pilar (Desvío Alberdi – Río Tebicuary) ronda un avance acumulado del 71 % con labores de terraplén, alcantarillas, subrasante mejorada con cal, subbase y base granular estabilizada, riego de imprimación, de liga y la carpeta asfáltica
Por su parte, el tramo 2, que une el Río Tebicuary con la capital departamental, ya fue concluido en su totalidad. Este tramo incluyó la construcción de un puente de 1.175 metros sobre el río Tebicuary que es el más grande de todo el departamento.
