Los espejos retrovisores tradicionales están abocados a desaparecer. Cada vez hay más vehículos que prescinden de ellos y ofrecen cámaras, como el segmento de vehículos pesados se está uniendo a este adelanto tecnológico, por ejemplo el camión Tesla Semi o el Mercedes-Benz Actros, el primer camión fabricado a gran escala que lo incorpora.
Así, la firma de la estrella presentó en 2018 el nuevo Actros sin espejos retrovisores gracias a la tecnología MirrorCam. El Mercedes-Benz Actros incorpora cámaras en el marco del techo y pantallas a cada lado de los pilares A.
Esto presenta dos ventajas; por un lado, al no contar con los espejos retrovisores tradicionales, mejora la aerondinámica, y en segundo lugar aumenta el campo de visión notablemente, dejando atrás los peligrosos puntos ciegos.
Los espejos tradicionales están montados en una posición fija, por lo que al girar el conductor pierde de vista el extremo del vehículo. MirrorCam gira la imagen de la cámara montada hacia el interior de la curva, de modo que el conductor tiene a la vista el final del camión.
El sistema funciona con cámaras digitales y pantallas: las cámaras están montadas a la derecha e izquierda en el marco del techo, y transmiten las imágenes a dos pantallas de 15 pulgadas montadas en los pilares A de la cabina.
El brillo de las pantallas se puede ajustar manualmente mientras que el área de visualización se puede cambiar en la unidad de operación de la puerta, como en el ajuste convencional del espejo retrovisor. Antes de cada arranque del motor, la cámara se configura automáticamente para captar una imagen completa del entorno desde cualquier perspectiva.
Como todas las nuevas tecnologías, deberemos adaptarnos a ellas progresivamente; no es lo mismo al ojo humano mirar a través de un espejo que de una pantalla formada por píxeles. Habrá conductores que se sientan inseguros al principio, o que incluso se den cuenta de que sus gafas de ver no están bien graduadas.
